ENTREVISTA A SOFÍA GONZÁLEZ

Dos proyectos contrapuestos, y la necesidad de nacionalizar el debate en la Ciudad de Buenos Aires de cara a las elecciones de octubre.

Escribe: Julián Saud

Entrevistamos a Sofía González, excomunera y militante popular de la Villa 31, y parte de la lista de Es Ahora Buenos Aires que encabezó Leandro Santoro. A días de terminadas la elecciones, y en camino a la jornada electoral de octubre, el debate es por la nacionalización de la discusión, y la confrontación a las políticas de dos proyectos paralelos de Ciudad que se presentan como falsas alternativas a las y los porteños, para que finalmente nada cambie.

Revista Hamartia: Terminaron las elecciones de la Ciudad de Buenos Aires, ¿Cuál es el balance?

Sofía González: El saldo fue muy positivo. Hubo un laburo militante impresionante, casa por casa, hablando con los vecinos, con las vecinas. Nosotros venimos de dos años durísimos de un Milei gobernando el país, que impacta directamente en la ciudad de Buenos Aires, y un Jorge Macri que es justo todo lo contrario de lo que Cristina viene planteando: el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires es el Estado más ineficiente que puede existir.

¿Cómo se mide ese saldo positivo?

Por primera vez en la historia ganamos 26 barrios de la Ciudad de Buenos Aires. Aún con todo lo que tenemos en contra. En la Ciudad, para los que quizás no están tan metidos, son 48 barrios. ¿Eso qué quiere decir? Que en más de la mitad de los barrios de la Ciudad de Buenos Aires ganó nuestra fuerza política. Ganamos seis comunas, eso nunca había pasado. En alguna oportunidad se había ganado la 4 y la 8, y ahora se sumaron la 3, la 5, la 9, la 15. Es muy fuerte.

¿Eso a qué obedece? ¿a la división del oficialismo en distintas listas? ¿o creés que hay un electorado que empieza a ver otra cosa?

Creo que lo tenemos que entender como un piso para octubre, creo que es la lectura más positiva que podemos hacer. El porcentaje que sacamos en estas elecciones tiene que ser el piso desde el que empecemos a construir para las jornada electoral de octubre. Y ni hablar para el 2027. Pero también influyó la división de los sectores que en 2023 habían votado a Jorge Macri y a la Libertad Avanza, que ahora fueron separados.

¿Qué rol jugó el uso de la Inteligencia Artificial en el video que muestra a Macri el mismo día de las elecciones diciendo que bajaba la candidatura de Lospennato y que llamaba a votar a Adorni?

Muchos dicen que no influyó; yo creo que sí, que lo hizo. Porque hubo un mensaje que hacía una cuenta, que Lospennato no iba a ganar y entonces el voto útil era para Adorni. En definitiva, el voto que nosotros a veces le decimos el voto de la derecha se redireccionó a último momento hacia Adorni.

Interesante, porque esa fake news, más allá de la falsedad o no, era verosímil. Escenificaba para un votante la idea de «no votés la opción perdedora, votá la opción ganadora».

Les puso una idea a la cabeza en plena veda electoral. Por eso, más allá de que si era creíble o no el personaje de Mauricio Macri, lo que decía llevó a reflexionar quizás a un votante que dijo «el voto útil es para allá». Eso es hacer trampa. Nosotros nunca nos manejamos así, siempre respetamos las instituciones. Siempre. Aún cuando los resultados no nos favorecieron.

En octubre de este año, otra vez la Ciudad de Buenos Aires vuelve a votar. Senadores nacionales y diputados nacionales. Vos decías que este es el piso. ¿Cómo se construye el techo al que hay que llegar?

No quiero un techo. Tenemos que ir a buscar a los que no nos fueron a votar. Algo que pasó en esta elección, es que hubo una baja participación, esto es evidente, lo dijo Cristina el domingo y es un análisis que todos vemos: quizás haya una desilusión con la política después de 10 años de ajuste de los trabajadores. Hay que ir a buscar, y creo que podemos hacerlo. Dimos una alternativa hasta el año 2015 con respuesta favorable desde la política para los sectores de los trabajadores y las trabajadoras. Eso existió, eso ya sucedió, no es que estamos yendo hacia una utopía. Y quien fue la protagonista y la conductora de ese proceso no solamente está con nosotros, sino que está en el rol de conducción. Por eso creo que es importante desde ese lugar reafirmarnos en nuestra identidad. Porque también está esa discusión de si tendríamos que cambiar un poquito algunas cosas para ir a buscar a ese electorado. Me parece que quizás lo que tendríamos que ver y ser más creativos, es en cómo comunicar lo que nosotros queremos hacer. No cambiar lo que nosotros somos, sino cómo llegarle al que queremos representar. Decirle: “Mirá, la realidad es que vos vivías mejor. Llegabas a fin de mes, estabas pensando si te ibas 15 o 20 días de vacaciones y ahora estás pensando si llegas al día 5. Porque entre todo lo que pagaste, las tarjetas de crédito, entre todas las deudas que tenés, después es poder estirar al 30″.

La propuesta de la campaña de Leandro Santoro, desde cambiar el color hasta plantear incluso en el debate cuando dijo que Adorni es Milei, Santoro es Santoro, cuando se nacionaliza, él elige no hacerlo. ¿Creés que eso es un error?

Te voy a decir algo hablando de la nacionalización de la elección: la vamos a vivir más en carne propia en octubre. Lo que me pareció un acierto absoluto y que lo podemos tomar para octubre también, fue el video de desarmar la motosierra. Eso fue un acierto. Y lo que sí quiero decir es que, a diferencia de lo que se pueda pensar, lo que nos enteramos en una de las reuniones que se hicieron antes de la elección, fue que no había surgido de una consultora. Esa idea no había surgido de ningún esquema de publicidad, sino que había sido un militante que se le había ocurrido que estaba bueno desarmar la motosierra. Así que, lo quiero recalcar es, che, mirá que hay que escuchar más a los militantes, a los que están en el territorio, que creo que nos representan. El tema de la motosierra, lo dijo Cristina el domingo, que parecía que iba contra los ñoquis y hoy estamos entendiendo que la motosierra esta entrando en nuestras casas a destruir nuestra calidad de vida y nuestra vida cotidiana.

Te llevo al barrio, al territorio. Vos sos una militante territorial de muchos años. ¿Cómo están viviendo los barrios en esta situación económica?

La están pasando muy mal. Muy mal al nivel de que quizás antes no sucedía. Por ejemplo los comedores y los merenderos son perseguidos por el gobierno de la ciudad, como si no estuvieran cumpliendo su función, pero la cumplen y realmente estan bancando con militancia. Porque no están siendo reconocidos por el gobierno de la Ciudad como para ponerlos en el lugar que les corresponde. Son fundamentales para que la gente, mirá lo que estamos hablando, pueda comer. Cristina lo dijo claramente, al primer sector que le pegan las medidas que está tomando este gobierno, es a los sectores de los barrios populares. Y también eso se vio en el resultado electoral. En todos, absolutamente en todos los barrios populares de la Ciudad de Buenos Aires, ganó nuestra propuesta política.

Se vió en los resultados un cambio muy significativo de votantes de Milei. Para poner un ejemplo mudó su electorado de la Villa 31 a Recoleta.

Sí. Es cierto que cambió la composicion social de su electorado pero en la Villa 31 no. Y eso lo quiero desmentir públicamente. En las PASO del 2023 se instaló que el Frente Todos había perdido. Y en realidad lo que había sucedido es que nosotros teníamos dos candidatos presidenciales que eran Grabois y Massa. Entonces, como ese voto se dividió, quedó como que la Libertad Avanza había salido primero. Pero en realidad, si juntás a los dos candidatos, habíamos salido primeros.

Y volvieron a ganar las generales y en el ballotage. O sea que en la Villa 31, desde el año 2009 a la fecha, gana el kirchnerismo en todas sus versiones.

Creo que ahí lo que es muy importante es la organización que hay. La verdad que yo me saco el sombrero con los compañeros y compañeras que están ahí. Es impresionante cómo articulan y se llevan bien. No sin discusiones. Todas las organizaciones políticas del barrio, con un respeto también muy fuerte de toda la comunidad. O sea, a nuestros compañeros referentes de la Villa 31 los respetan desde el cura del barrio hasta aquellos que, por cuestiones quizás más de necesidad, están más cerca de lo que tiene que ver con el gobierno de la Ciudad, porque lógicamente es el único que da trabajo a través de obras.

¿Como se traduce en la realidad ese ejercicio de comundidad?

Por ejemplo, ahora están los enfermeros del CESAC 47 que tienen miles de situaciones que requieren respuesta y el gobierno de la Ciudad no la da. ¿Y a quién vienen a buscar? A nosotros nos vienen a buscar. Y nosotros estamos ahí, los acompañamos, reclamamos en la comuna, reclamamos en los distintos organismos, le pedimos a todos los que les tenemos que pedir, al Ministerio de Salud, al Jefe de Gobierno. Estamos acompañando todos los reclamos del barrio. Y eso se valora. Eso no significa que ganes todas las discusiones o que te pongas un objetivo y la vas a ganar siempre. En el corto no, pero a largo plazo eso te lo reconocen.Si bien uno no puede resolver la situación diciendo vamos hacer una obra pública, porque no estamos en ese lugar de responsabilidad, la gente del barrio valora que los hayamos acompañado en cada uno de esos momentos donde necesitaban que estemos presentes. Y estamos hablando de años y años, atravesando distintos gobiernos.

Retomando la cuestion electoral de cara a octubre. ¿Como creés que hay que encarar el debate público?

Me parece que tiene que ser nacional el debate. Hay dos proyectos. Creo que esa es la discusión: o Milei o nosotros. Milei ya viene demostrando lo que quiere hacer a nivel nacional y ahora lo quiere hacer en la Ciudad de Buenos Aires. Y se quieren posicionar para quizás ser la propuesta alternativa a Jorge Macri desde su lugar en 2027. Bueno, no le demos las herramientas para que estos tipos se empoderen. Paremos en la Ciudad de Buenos Aires el avance de las propuestas de Milei.

¿Quiénes somos «nosotros»?

Nosotros somos lo que hicimos; con el reconocimiento de que quizás durante el gobierno de Alberto no se dieron todas las respuestas que se tenían que dar y que eso hizo que no nos acompañen en el ballotage, porque las generales la ganamos. Nosotros tenemos que salir a decir que la deuda del FMI, que los condicionamientos que podamos tener como país y como Ciudad de Buenos Aires, no lo pueden pagar el sector de los trabajadores y trabajadoras. Con esa claridad nosotros vamos a ir a buscar votos. Cuando nosotros gobernemos, no vamos a hacer que se sacrifiquen los que no puedan llegar a fin de mes, o no puedan tener vacaciones, o no se les respetan los derechos laborales. Nosotros somos los que vamos a hacer que todo eso se respete. Con esa claridad. No más o menos. Hay que decir claramente que nosotros no estamos de acuerdo con que haya quienes se enriquezcan de forma desmedida sobre las espaldas del pueblo trabajador. No estamos de acuerdo. Nosotros tenemos que convencer al pueblo trabajador que somos más que esas minorías.

Esta nota forma parte de la edición digital de revista hamartia Año 16 / Mayo 2025